COLEGIO EXTERNADO DE SAN JOSE

COLEGIO EXTERNADO DE SAN JOSE
La espiritualidad en la Compañía de Jesús, herencia legada por nuestro padre y fundador Ignacio, es ignaciana. En la ignacianidad el centro no es Ignacio sino Jesucristo.

miércoles, 18 de julio de 2012

Boletín 1


COLEGIO EXTERNADO SAN JOSÉ

COMUNIDAD MAGIS, BOLETÍN INFORMATIVO
# 1, año 2012, 3er período


Presentación

            Jesús sigue en medio de nosotros y nosotras, así como a la par de sus apóstoles en los inicios del cristianismo primitivo. Jesús nos dejó a Ignacio de Loyola, noble del siglo XVI, con un importante aprendizaje: “el amor se ha de poner más en las obras que en las palabras”. Como Comunidad Magis, recogemos lo que estos dos hombres experimentaron de Dios, para seguir esa búsqueda del bien, para ponerlo en servicio del prójimo y prójima. A continuación, presentamos este sencillo material que pretende recopilar nuestra experiencia de meses anteriores, del presente año, todo para la “Mayor Gloria de Dios”.

Magis Infantil (4º y 5º T.M. y T.V.)

Al inicio del año, nos reunimos los integrantes de 5º grado que pertenecimos a Magis el año anterior. En dicha reunión, hubo una presentación de los y las integrantes, dinámicas, una lluvia de ideas sobre lo que recordábamos del año anterior y una charla sobre todo lo que hemos aprendido con la comunidad “Magis Infantil”. Unos días después, buscamos junto con las maestras de cada curso, nuevos y nuevas integrantes para nuestra comunidad. Se seleccionaron aproximadamente 40 nuevos integrantes; en la siguiente reunión, se les dio la bienvenida y se les explicó el trabajo en Magis y les vimos muy dispuestos a realizarlo.

A lo largo del año, hemos tocado temas como: “La autenticidad”, “Mi persona” y “Los y las demás”. Nos hemos estado preparando y motivando para la visita al asilo que pronto se realizará. Esperamos mostrar lo mejor de “Amar y Servir”.

Servidores (6º y 7º T.M. y T.V.)



Hemos realizado una serie de actividades que nos han llevado a convivir más como hermanos y hermanas. Los días sábado de 9:00 a 11:00 de la mañana nos reunimos para compartir temas sobre autoconocimiento y el conocimiento de las demás personas, reflexionar sobre la vida y la convivencia humana, todo para acercarnos más a Jesús y al servicio de los y las demás.

Este año, a nuestra comunidad pertenecemos cerca de 57 personas, viendo esto como un “crecimiento comunitario”. Desde el mes de mayo estamos dinamizando nuestro trabajo pastoral en la “Escuela Barrio Belén”, impartiendo clases de manualidades, ajedrez y reforzamiento académico en matemáticas, con la ayuda de nuestros acompañantes, conociendo también la vida de otros niños y niñas de escasos recursos.

Peregrinos (8º y 9º T.M. y T.V.)


 A lo largo del presente año, se ha dividido nuestro trabajo en dos partes: Proceso Formativo y Pastoral Social. En el Proceso Formativo, se han reflexionado diversos temas tales como: el crecimiento personal, la autoestima, los medios de comunicación, la comunidad “encuentro con   el otro u otra” y la  Espiritualidad Ignaciana.

Estos temas son impartidos por un grupo de Peregrinos de la “Comisión de Formación”, con el objetivo de que exista entre los y las jóvenes una enseñanza más dinámica, llevando así la iniciativa por los mismos integrantes del grupo. En cuanto a la Pastoral Social, se lleva a cabo una actividad de refuerzo y acompañamiento en la “Escuela Barrio Belén”, como también de conocimiento de la realidad de otros y otras jóvenes. En el mes de Julio, se iniciará con el refuerzo escolar en la parroquia de Mariona.

Amigos en el Señor (1º y 2º bachillerato)


Desde el mes de abril hasta la actualidad, hemos asistido a los proyectos de refuerzos académicos en la escuela Uruguay y asistencia hospitalaria y sanitaria en el Hospital Divina Providencia, “Hospitalito”.

En la Escuela Uruguay, hemos preparado clases personalizadas a los alumnos y alumnas de dicha escuela que sirvan de refuerzo y complemento para sus estudios académicos; además, hemos intentado establecer vínculos de confianza con las niñas y con los niños para ayudarles a crecer como personas.

En el Hospitalito, hemos hecho tres visitas: la primera, para ayudar en los quehaceres que tienen mayor urgencia, como: limpiar baños, lavar trapos, limpiar ventanas, barrer, trapear, entre otros; la segunda dedicada a visitar a las y los pacientes para conversar con ellas y con ellos y que el aprendizaje sea mutuo, y la tercera, ha sido para iniciar un trabajo de creación y mantenimiento de uno de los jardines del hospital.

Comunidad en Servicio (Exalumnos y Exalumnas).

            Nuestra comunidad ha realizado una labor de acompañamiento en las distintas comunidades de MAGIS y ha sido testiga del proceso de formación de las distintas etapas. Hemos acompañado tanto en la formación, como en las diversas actividades de la Pastoral Social. A su vez, hemos iniciado un nuevo proceso de formación con el acompañamiento de Luis Carlos Orellana, ex alumno externadista de la promoción 1990. La Comunidad en Servicio, aprovecha para felicitar a las demás comunidades por el progreso y ánimo que presentan en su formación y pastorales correspondientes; se les motiva a seguir aportando sus energías y ánimos en la construcción del Reino de Dios que Jesús tanto soñó.

Como información complementaria, parte de nuestra comunidad ha participado en dos encuentros juveniles en los que se ha logrado tener contacto con otras experiencias de diversos grupos y comunidades (Encuentro Las Juventudes constructoras de Justicia y Paz, domingo 18 de marzo de 2012, UCA). También hemos compartido trabajo pastoral con otros grupos eclesiales (Encuentro Pastoral Parroquia Tonacatepeque, lunes 2 de abril de 2012) También, dentro de nuestras actividades formativas, hemos participado de la celebración a Monseñor Romero, la Vigilia de Pentecostés, entre otros. Todo lo anterior, para contribuir al crecimiento de nuestros  jóvenes.


Actividades pendientes del tercer período:


Mes de Julio:
+ Reuniones: sábado 7 (Asamblea), 14 y 21.
+ Semana Ignaciana: del 23 al 27.
+ Eucaristía Dominical dedicada a San Ignacio: 29.

Mes de Agosto:

+ Reuniones: sábado 11, 18 y 25.
+ Jornada de Solidaridad: del 13 al 31

viernes, 13 de julio de 2012

En la ignacianidad el centro es Jesús.


Difícilmente encontramos en los seguidores y seguidoras del Señor Jesús hombres y mujeres que estén llenos de vida, alegría y sentimientos positivos para dar, compartir, dignificar, liberar y que sean también portadores y portadoras de buenas noticias. Jesús experimenta y comparte a un Dios de vida, compasión, alegría y dignificación del Ser humano, como lo experimentaron y anunciaron algunos profetas en el Antiguo Testamento. Jesús es heredero de esta experiencia, de esta tradición de anuncio, misericordia y reconciliación (Mateo 9,18-26). Por Jesús, el cristianismo es humano céntrico.

Dios nos enamora, nos habla al corazón, nos seduce con su ternura. Dios se casa con la humanidad en derecho y en justicia. Ama a su pueblo como un hombre enamorado ama a su esposa, como un padre tierno ama a sus hijos e hijas, como un amigo ama a sus amigos y amigas. El vínculo entre Dios y la humanidad es un vínculo de amor, no de terror.  La relación que Dios quiere con todos y todas es de “cercanía confiada”, no de “distancia temerosa”. La cercanía confiada es una relación sana con Dios. La distancia temerosa es una relación terrorífica con un ídolo y Dios no es un ídolo (Oseas 2,16.17b-18.21-22)

Esta "cercanía confiada" tiene sus cimientos en el amor, el derecho, la justicia, la misericordia, la compasión y la fidelidad, porque Dios es un Dios clemente y misericordioso. Dios es así, pero no siempre lo experimentamos así, por lo tanto tampoco lo presentaremos así. Dios no es buena Noticia para quienes nos escuchan, no por su naturaleza, sino por nuestras distorsiones doctrinales. “El Señor es clemente y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad; el Señor es bueno con todos, es cariñoso con todas sus criaturas” (Sal. 144, 8-9). El Señor Jesús no quiere que andemos por la vida llenos o llenas de vergüenza. Él es fuente de vida, salud y  dignidad.

Es asombroso Jesús cuando con la suavidad de la verdad nos envuelve con sus palabras. Esa verdad no lastima, no hiere, no descalifica. La verdad es suavidad en la palabra y aceptación  cariñosa de cómo somos, porque así nos anima Jesús: "ánimo tu fe te ha curado". Los milagros fortalecen mi fe, pero no son condición para ella, pero mi fe me hace descubrir los milagros cotidianos del amor incondicional de Dios como en el caso de la mujer con flujo vaginal. Quizá sea más llevadero el rechazo social, aunque no es humano ni cristiano,  que la condena religiosa, la condena ritual, la exclusión de la salvación, que algunas  religiones pregonan a los cuatro vientos. “El mayor sufrimiento de esta mujer con pérdidas de sangre no era su enfermedad, sino el hecho de tener que vivir en estado de impureza ritual. No podía convivir con los suyos como una mujer sana. Se sentía humillada, más alejada del Dios santo que los demás” (J. A. Pagola).

Jesús es un hombre de mística. Entendiendo como mística no una evasión de la realidad humana, no un vivir lo espiritual como algo separado de lo material, no como enajenación, sino como el marco de la realidad que no se agota en ella misma, sino que va más allá de sus limitaciones; es el más de la realidad. Es ver con los ojos de Dios la realidad humana y del mundo.“El Evangelio nos presenta a Jesús dando vida, felicidad, motivos de gozo, alegría y sentimientos positivos a quienes se ven privados de todo eso. Así entendió Jesús la vida. Así presentó sus convicciones, su ética, su espiritualidad y su mística” (J. A. Pagola).

Jesús le sonríe a la vida, sonríe con todos aquellos y aquellas que después de conocerlo encuentran en sus vidas motivos positivos para seguir sonriendo con los y las demás, extendiendo la buena noticia a personas y circunstancias poco gratas y poco acogedoras. Jesús haznos ser personas llenas de vida, alegría y sentimientos positivos. Como dice el canta autor Víctor Lidio Jara en su "plegaria a un labrador": “Levántate y mira la montaña, de donde vienen el viento, el sol y el agua; tú que manejas el curso de los ríos, tú que sembraste el fuego en mi alma…” Seamos personas sonrientes, alegres y que dignifican a otros y otras en el trato cotidiano, como Jesús de Nazaret. 

miércoles, 11 de julio de 2012

Algo de historia …


Grupo juvenil ignaciano “MAGIS” El  Salvador.




La experiencia de MAGIS, inició a partir de la elaboración de un proyecto comunitario que los y las jóvenes del Colegio Externado San José de El Salvador realizaron como concreción de la experiencia vivida en el primer curso-taller de líderes ignacianos, realizado en el año 2004 en Guatemala. El curso taller contó con la participación de los colegios: Liceo Javier de Guatemala, Colegio Centroamérica de Nicaragua y Externado de San José de El Salvador.

El nombre de este proyecto se llamó en un primer momento “Comunidad de jóvenes ignacianos para la solidaridad”, atendiendo a la necesidad de crear una comunidad juvenil  ignaciana que ayudara a los y las jóvenes del turno matutino y vespertino a crecer humana, espiritualmente y en compromiso cristiano con la realidad salvadoreña. Sus actividades como grupo juvenil comenzaron ese mismo año con 19 integrantes, quienes fueron acompañados y acompañadas por la profesora coordinadora de ese proyecto.



Con estas grandes líneas: Programa formativo, inspiración, rasgos de identidad ignaciana, metodología de trabajo con las dimensiones del Paradigma Pedagógico Ignaciano (PPI) y objetivos para cada etapa, las reuniones, experiencias de misión, oración, retiros y otras actividades, marcaron el inicio de este sueño. En el 2006 los y las jóvenes buscaron un nuevo nombre para el grupo: MAGIS por las palabras:

M (misión) 
A (apertura) 
G (gracia) 
I (ilusión) 
S (solidaridad). 


El nombre de la comunidad surge por dos razones: Una, por lo que significa en los ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola: “EL MÁS” o el “MAYOR” servicio por Dios y su causa. Dos, por lo que la experiencia de comunidad generó durante los tres primeros años. Fue así que surgió el primer logo y el primer lema, que identifica a los integrantes de este grupo juvenil.

A partir de esta iniciativa, en el 2006, asesores representantes de los tres colegios antes mencionados, se reunieron en el Colegio Externado San José de El Salvador, para evaluar, después de dos años, la experiencia del primer curso-taller, del que se valoró el fruto del grupo juvenil en el Externado.

Fue así que en esta reunión y a partir de la experiencia de las comunidades juveniles ignacianas en el Externado de San José de El Salvador (MAGIS) y el Instituto Loyola de Nicaragua (MAGIS), se elaboró una propuesta para grupos juveniles MAGIS en los colegios de la Compañía de Jesús en Centroamérica.


lunes, 9 de julio de 2012

Pausa Ignaciana.



PAUSA DIARIA IGNACIANA: El Examen (EE. 43).

“Porque el Señor es justo y ama la justicia, los que son rectos contemplarán su rostro” (Sal.11, 1-7).


Una de las características principales de la espiritualidad ignaciana es la del “discernimiento de la voluntad de Dios en la vida” y uno de los elementos para realizarla es la pausa o examen diario.


SEGUNDA ASAMBLEA GENERA.

El día sábado siete de julio tuvimos la segunda asamblea general de Magis. Las distintas comunidades nos reunimos para compartir nuestra vida traspasada por la espiritualidad ignaciana. Compartimos esta vida interior  que vamos saboreando  en nuestro caminar comunitario, para amar y servir a nuestros prójimos y prójimas, rostros encarnados de Jesús. Motivados y motivadas por Jesús queremos amar y servir porque como dice el Señor  en su palabra: “cuanto hicieron a uno de estos  hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicieron” (Mt, 25, 40).

El testimonio que nos dejan los evangelistas sobre la autocomprensión que Jesús tiene de si mismo es nuestra brújula, nuestro norte; es la inspiración de nuestro quehacer apostólico: “Jesús fue a Nazaret, donde se había criado; el sábado entró como de costumbre en la sinagoga y se levantó para hacer la lectura. Le presentaron el libro del profeta Isaías y, abriéndolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado por la unción. Él me envió a llevar la Buena Noticia a los pobres, a anunciar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, a dar la libertad a los oprimidos  y proclamar un año de gracia del Señor.  Jesús cerró el Libro, lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos en la sinagoga tenían los ojos fijos en él. Entonces comenzó a decirles: "Hoy se ha cumplido este pasaje de la Escritura que acaban de oír" (Lc. 4, 16-21).


Nuestra vida, en este caminar juvenil cristiano, está llena de tantas acciones buenas, de amor y servicio, que en ella encuentra su sentido, plenitud, y  dirección. En la espiritualidad ignaciana, somos jóvenes, hombres y mujeres, que “descubrimos a Dios en todas las cosas y todas las cosas en Dios". Tratamos de ser hombres y mujeres contemplativos y contemplativas en la acción. Hombres y mujeres jóvenes que desde la contemplación y la reflexión  actuamos para hacer presente el Reino de Dios en un mundo lastimado, fraccionado y crucificado; un mundo carente de buenas noticias.

Como grupo juvenil MAGIS queremos imitar a Jesús, manso y humilde, y seguirle hoy en este contexto social nuestro como lo han hecho muchos hombres y mujeres en la historia. Procurando repetir las relaciones que Jesús tuvo con Dios, las mujeres, las personas enfermas, los niños y niñas, el dinero y la autoridad entre otros. Jesús era un hombre bueno  y de bien.

¿Qué son los Ejercicios espirituales? Son un ejercicio para fortalecer nuestro espíritu como cuando un atleta se prepara para una competencia deportiva. Hace ejercicios para estar en óptimas condiciones. También los ejercicios espirituales son un camino hacia Dios; son también encuentro de reconciliación, opciones de vida, identificación con la persona de Jesús en su vida ordinaria, seguimiento con la cruz y acción de gracias por tanto bien recibido. Al final los Ejercicios espirituales, después de ordenar todo el ser y el quehacer del cristiano o de la cristina, nos invitan a contemplar la realidad con amor para alcanzar amor. Los Ejercicios son un caminar de la creatura hacia Dios, hacia su Creador.

Después de nuestra oración continuamos con un tema de formación para todas las comunidades. El tema fue sobre la PAUSA IGNACIANA: Teniendo claro que Dios es, nuestro principio y fundamento, ese Alguien que anima nuestra vida, la pausa es  un método para comprender nuestro caminar, caminar hacia nuestro Creador y Señor. Es “examinar nuestra vida y hacernos responsables por ella”. Es “la forma más adecuada para ir discerniendo el paso del Señor en la propia vida”.

La pausa es un alto en el camino cotidiano para discernir sobre nuestro amor y libertad; para aprender a "Sentir y Gustar" las cosas internamente donde la contemplación y la acción involucran a toda la persona, sus facultades, sus deseos, sus sentidos y sus afectos. Como método es sencillo: Los preámbulos, la oración y el examen.

Hay que reflexionar nuestra vida y descubrir el centro. La pausa es descubrir cómo Dios está actuando amorosamente en mí, donde mi vida es una oración permanente, una oblación agradecida y una oración hecha vida en mi modo de proceder.

“Dios nos sonríe y alienta desde la vida misma o nos mira con cariño apenado por no saber discernir los signos de los tiempos.  Es en el momento a momento de la vida corriente donde se juega nuestra fidelidad a su amor, a la vida que nos regala y a su Alianza en Cristo”.

La Pausa Diaria

Me voy relajando, acallando el ruido interior y tomando conciencia de que voy a hablar con Alguien que me acompaña.

El examinar el nivel de conciencia cristiana con que vivo mi vida diaria es una forma de oración muy importante


1.      Pido luz, ser lúcido, intentando vivir en transparencia: "sin el misterio de la luz la vida completa se vuelve laberinto".

2.      "Por dónde pasa mi Señor". Voy recorriendo la jornada, viendo las pequeñas o grandes presencias de Dios en las personas, en los sucesos, en los sentimientos, en las lecturas, o en el trabajo bien realizado...

3.      Doy gracias reconociendo tanto bien recibido y tanto bien dado durante este día.

4.      Pido perdón por todo lo ambiguo, erróneo, dañino o negativo que haya podido hacer.

5.      "¿Señor, qué quieres que haga?". Pienso en cómo espera el Señor que actúe mañana.



viernes, 6 de julio de 2012

Ignacio pide a María “Ser puesto con su Hijo”.




La espiritualidad ignaciana conocida hoy como "ignacianidad" es totalmente laica; pero esta afirmación no excluye la dimensión sacerdotal. Jesús al igual que Ignacio fue laico, pero eso no invalida que le Carta a  las y los Hebreos presente a Jesús no sólo como sacerdote, sino como sumo sacerdote y que con él se inicie una nueva concepción del sacerdocio como servicio, no reducido a lo sacro y a lo cultual. Todo jesuita antes de ser sacerdotes es laico como Ignacio pero después pensando en un mejor servicio opta por la vida religiosa y no todos  y todas por el hecho de ser laicos y laicas, hemos sido ignacianos. La ignacianidad como espiritualidad es una opción, un estilo de vida y una práctica evangélica, un modo de ser y proceder.

La espiritualidad en la Compañía  de Jesús, herencia legada por nuestro padre y fundador Ignacio,  es ignaciana. En la ignacianidad el centro no es Ignacio sino Jesucristo. En esta espiritualidad se podrían distinguir dos etapas complementarias: La primera, desde la conversión en la casa fortaleza de Loyola hasta la incipiente formación de la compañía de Jesús  en Paris, con aquellos jóvenes universitarios "amigos en el Señor" que toman votos religiosos en Montmartre. La segunda, como Orden Religiosa al servicio del Papa para la misión. En la Orden Compañía de Jesús se concretiza un modo específico de vivir la ignacianidad, sabiendo y aceptando con humildad, que no es la única opción. Se puede ser ignaciano sin ser jesuita, pero no se puede ser compañero y seguidor de Jesús sin ser ignaciano porque la ignacianidad es el fondo espiritualidad de nuestro modo de proceder.

En la historia ha habido y seguirán habiendo congregaciones o institutos laicos o religiosos que se inspiran en la espiritualidad ignaciana, pero no son jesuíticos, como muchos movimientos laicos no son ignacianos aunque nazcan y se desarrollen en el seno de la Compañía de Jesús. En esa deficiencia hay un fallo. No todos los laicos y laicas que trabajan o colaboran con jesuitas son ignacianos o ignacianas en su modo de proceder, aunque teóricamente se identifiquen con nuestra espiritualidad. La ignacianidad no se da por ósmosis. “Los estudios, los compañeros y la oración apostólica lo llevan a descubrir un nuevo camino espiritual, el de contemplativo en la acción”.

Es evidente que no es lo mismo lo ignaciano y lo jesuítico, eso es obvio, pero tampoco se puede insinuar que lo jesuítico le ha robado a lo ignaciano su matriz laica, en Ignacio no es excluyente su ser laico y después su ser presbítero, son realidades unitarias y complementarias en su persona. Los jesuitas no nos hemos apropiado indebidamente la espiritualidad laica, afirmar esto sin más es crear ruptura en la vida de Ignacio de Loyola y en la vida de los primeros compañeros. Ellos, partiendo de la vivencia de los Ejercicios Espirituales y del discernimiento personal y compartido deciden en las deliberaciones presentarse al Papa, si no es posible viajar a la Tierra del Señor, en el plazo de un año. Ellos se pondrán a disposición del Romano Pontífice, en Roma.

Aunque la ignacianidad es totalmente laica por su génesis, no es menos cierto que si no se hubiera institucionalizado y puesto por escrito estaría como muchas espiritualidades en la iglesia, al libre albedrío. Lo jesuítico y lo ignaciano tampoco son opuestos y excluyentes. Lo jesuítico es un modo de vivir lo ignaciano. San Ignacio,  por opción y por misión se consagró presbítero junto a los primeros compañeros en Venecia.

En Roma nace la Orden Compañía de Jesús. Lo importante de la ignacianidad no es el debate, si es o no laica, para Ignacio y sus diez compañeros lo fundamental es el modo de vivir el seguimiento de Jesús, por eso pide con insistencia ser aceptado en su compañía, hasta que Dios Padre, Dios hijo y Dios Espíritu Santo aceptan al peregrino la petición que hace a la Virgen María en la Capilla de la Storta, camino a Roma.

Esta espiritualidad laica  e ignaciana se pone al servicio de la iglesia (Jerárquica), para el bien de las almas y para la misión, llevar el evangelio, la vida de Jesús, a todas partes del mundo, especialmente a las fronteras no territoriales, sino  a aquellas donde se atenta contra la vida, la existencia y  la dignidad humana. Estos hombres disponibles, y no siempre entre laicos y laicas podemos encontrar esa disponibilidad, no eran laicos, sino sacerdotes con estudios universitarios enviados a las fronteras para hacer la contrarreforma desde y para la Iglesia universal. La Compañía desde su origen es internacional y universal. Fundamental para el Cuerpo Apostólico es la disponibilidad y la obediencia; una vida sencilla y casta.